Campeonísimo / Carmen Ortega Ricaurte

En el año de 1530 nació en una pequeña aldea española un potrico, al que llamaron Campeonísimo. Su dueño, Juan de Ortega, El Bueno, se encargó de darle una educación muy esmerada por lo cual llegó a aprender a leer y a escribir, caso único en la historia de los caballos. Un día su amo decidió viajar a las Indias y trajo consigo al caballito. En el barco venía un viejo marinero quien les contó a los pasajeros la fascinante historia de Cristobal Colón y del descubrimiento de América. Se unieron a la expedición de Gonzalo Jiménez de Quesada. Vivieron numerosas aventuras en su recorrido por el Reino de la Nueva Granada. Es un libro didáctico y ameno que cautiva al lector desde las primeras páginas. Incluye glosario.

CONTENIDO:

Nota preliminar -- Dedicatoria -- Mis primeros recuerdos -- De lo que me aconteció en mi primera aventura -- De cómo se portó conmigo don Cucufato -- De cómo cambié nuevamente de dueño -- De cómo gané un premio y mi amo mucho dinero -- De cómo Juan de Ortega llegó a la mayoría de edad y la profesión que escogió -- En camino hacia Sevilla -- De cómo resultó ser mi nueva compañera -- De cómo un lapsus cálami de mi amo casi me cuesta la vida -- De cómo nos libramos de naufragar a causa de una tormenta -- La historia de Pata de Palo -- De lo que una noche descubrió Rodrigo de Triana -- De lo que encontró Cristóbal Colón en aquella isla maravillosa -- De cómo Pata de Palo perdió su pierna -- De nuestras aventuras en tierras taironas -- De cómo rescatamos a un gran sabio del cautiverio en el que lo tenían -- De cómo un hombre que se suponía ser hijodalgo cometió una bellaquería -- De cómo los conquistadores les dieron una lección de zapateado a los micos y loros de la selva -- De cómo en Sompallón fui atacado por una monstruosa criatura -- De cómo en La Tora perdí una parte importante de mi anatomía 00 De cómo mi amigo Marubare me dio un consejo sabio y oportuno -- De cómo mi general Gonzalo Jiménez de Quesada decidió desviarse del río y tomar el camino de la sal -- En donde Pericón narra una fabulosa historia -- De lo que le sucedió a Juan Duarte por comerse un sapo venenoso -- De cómo Juan de Ortega con su ingenio nos salvó a las cabalgaduras de perecer en la montaña -- De cómo le di una lección a Juan el Gordo y de la venganza que él se tomó -- De cómo viví mi primera aventura amorosa y de las consecuencias que ésta tuvo -- De cómo Juan de Ortega le salvó la vida al capitán Suárez Rendón -- De cómo fray Domingo de Las Casas se convirtió en niñera -- De cómo "Dios no castiga ni con palo ni con rejo'' -- De cómo renacieron las batallas entre indios y españoles -- De cómo unas indias enloquecieron a los conquistadores -- Historia de Acusetas Panderetas Calzoncillos de Bayetas -- De cómo vencimos al Zaque Quemuenchatocha -- En donde se demuestra que más vale maña que fuerza -- La trágica historia del indio de la mano y las orejas cortadas -- De cómo era el fabuloso santuario de Sogamoso -- De lo que le aconteció a Acusetas -- De cómo don Baltasar Maldonado y yo salvamos al general Jiménez de Quesada -- El misterio de los corazones de oro -- De cómo los españoles y los muiscas se aliaron para combatir a los panches -- De cómo Juan de Ortega hizo un descubrimiento sensacional -- De cómo se esfumó un tesoro -- De cómo se escogió un lugar lindo para la ciudad de Santafé de Bogotá -- De cómo un chisme casi le cuesta la vida al capitán Lázaro Fonte -- De cómo dos visitas sorpresivas retardaron la partida de don Gonzalo Jiménez de Quesada --De lo que aconteció el 27 de abril de 1539 -- Epílogo -- Glosario